Inicia el bombardeo de buenas y casi perfectas personas queriendo meterse en nuestro cerebro como los salvadores del mundo radicados para nuestra fortuna en San Luis Potosí.

¿Que ofrecen? …  Esa es la pregunta que nos debemos hacer.

 

Ya basta de dejarnos ir por la apariencia y por el rollo mareador que cada temporada de elecciones escuchamos, con las ligeras variantes que imponen los asesores de acuerdo a las tendencias del marqueting político, no es  fácil elegir si pensamos bien.

 

San Luis ha caído hasta el fondo, en apariencia y en posición.   Por eso el proximo gobernador electo debe ser una persona que de verdad tenga un ambicioso plan de trabajo, que no esté comprometido con nadie, y el presidente municipal debe restaurar una ciudad herida de muerte.

 

No podemos pensar en no votar;  con el 5% de los paleros que los siguen, tenemos para otra imposición; debemos votar pero exigir, hacer conciencia de que están trabajando para nosotros.

 

En mi muy particular punto de vista, los partidos políticos ya no sirven, ninguno,  del color que sea, todosd  están completamente putrefactos desde el interior, y de ellos emanan los candidatos, que con ese solo hecho se convierten en candidatos impuestos, no electos, de los cuales, en las elecciones, si se elige por medio del voto son los que nos representan. Y traen a costa compromisos con el partido  y numerosos grupos que lo encumbraron; esto  no es democracia.

 

La posibilidad de iniciar un choque armado interno,  revolución pues, es casi imposible, por estar preocupados en sobrevivir; ya que  hemos perdido la capacidad de lucha, pues México desgraciadamente se ha convertido en un pueblo conformista y mediocre, que vive espléndidamente con su salario de tres pesos diarios, mientras que el ámbito político cada vez defrauda más y más.

 

Es hora de tomar conciencia, de exigir, de despertar de este ensueño que nos está hundiendo a todos, sin excepción…